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Estrategias preventivas para reducir la morosidad en inmobiliarias en Chile

Escrito por Team Moonflow Chile | octubre 08, 2024

La morosidad es un riesgo asociado a cualquier empresa que dé servicios o productos a crédito a sus clientes. En especial si no tienen un software de cobranza que les ayude con la gestión de sus cuentas.

¿Qué vas a encontrar en este texto?

Las inmobiliarias en Chile no son ajenas a este inconveniente. Y es que también pueden decidir ofrecer entre sus servicios:

  1. La venta al crédito de propiedades, sin intermediación de entidades financieras. Aprovechando que la nueva Ley 21631 en Chile atrae compradores al brindarles beneficios tributarios por la adquisición de una vivienda nueva. 
  2. El arrendamiento de bienes inmuebles.  

Bajo ambas modalidades hay probabilidad de acarrear una alta tasa de morosidad, si no se ha hecho una adecuada validación de los antecedentes de los individuos, se han incurrido en errores en la política de créditos o se ha manejado mal la gestión de cobranzas. 

Estrategias para reducir la morosidad

La morosidad es lamentablemente un problema que siempre vamos a encontrar en nuestra gestión de cuentas por cobrar; sin embargo, es prudente que esta se encuentre en índices muy bajos, ya que de esa manera no tendrá un alto impacto en el flujo de caja.

Para reducir los retrasos en el pago de mensualidades, es crucial implementar una estrategia preventiva de cobros, o una serie de ellas. A continuación, compartimos algunas medidas efectivas.  

1.  Enviar facturas detalladas

Es fundamental que los clientes sepan con precisión por qué están pagando, ya que una factura clara y desglosada reduce el riesgo de malentendidos y disputas.

En el caso de las inmobiliarias, si hablamos de créditos hipotecarios, la factura debe incluir detalles como el monto del capital, los intereses, seguros asociados y cualquier comisión o cargo administrativo. Esto permite al cliente comprender exactamente qué parte de su pago se destina a cada concepto del préstamo.

Por otro lado, si es alquiler de propiedades, la factura debe especificar el importe del alquiler, gastos de mantenimiento, servicios públicos, y cualquier otro concepto adicional, como cuotas de estacionamiento o reparaciones. Esta transparencia facilita que el cliente entienda sus obligaciones y evita conflictos que puedan retrasar el pago.

2. Mantén una comunicación abierta con los clientes

Existen diferentes motivos por los cuales los inquilinos o propietarios pueden retrasarse en el pago de las mensualidades. En muchos casos, el retraso no se debe a la falta de voluntad para pagar, sino a problemas económicos reales que afectan su capacidad financiera. En este contexto, mantener los canales de comunicación abiertos y bidireccionales permite conocer estas dificultades a tiempo y buscar soluciones conjuntas.

Al establecer una comunicación clara y accesible, se pueden negociar alternativas como plazos de pago flexibles, la reestructuración de la deuda o incluso descuentos puntuales por pago anticipado. Esta actitud no solo reduce la posibilidad de que la morosidad se prolongue, sino que también mejora la relación con el cliente, fomentando la confianza y el compromiso de pago a futuro.

 

3. Revisa las políticas de crédito de tu empresa

Tanto en el caso de compradores de viviendas como de inquilinos, es esencial evaluar a quién le estás ofreciendo tus servicios. Si detectas una alta tasa de morosidad en tu cartera, es un indicador de que tus políticas de crédito necesitan ajustes. Para los compradores de viviendas a plazos, esto podría significar implementar evaluaciones más rigurosas del historial crediticio, establecer requisitos de ingresos más estrictos o aumentar el monto de la cuota inicial.

En cuanto a los inquilinos, podrías reforzar las verificaciones de antecedentes financieros, solicitar depósitos de seguridad más altos o exigir avales sólidos. Estas revisiones de las políticas ayudan a filtrar a los clientes con mayor riesgo de incumplimiento, reduciendo la morosidad y mejorando la estabilidad financiera de tu negocio.

4. Evalúa tus contratos y haz los ajustes necesarios

Ya sea una venta en cuotas o un arrendamiento, los contratos son fundamentales para proteger los intereses y establecer las obligaciones de cada parte. Si enfrentas una alta morosidad, es importante revisar estos contratos para identificar posibles debilidades o cláusulas que no están siendo efectivas. Asegúrate de que los contratos incluyan términos claros sobre los plazos de pago, penalidades por retrasos, intereses por morosidad y los pasos a seguir en caso de incumplimiento.

5. Motiva a que los clientes activen el débito automático

Una estrategia eficaz para reducir la morosidad es incentivar a los clientes a activar el débito automático. Este sistema permite que las cuotas o rentas se descuenten automáticamente cada mes de sus cuentas bancarias o tarjetas de débito, garantizando pagos puntuales y minimizando el riesgo de morosidad.

Además, para brindar mayor seguridad y tranquilidad a los inquilinos o compradores, algunas entidades financieras ofrecen la opción de establecer un tope máximo para cada operación, evitando así sobrecostos imprevistos. Esta medida no solo facilita el cumplimiento de los pagos, sino que también refuerza la confianza del cliente en el sistema, al reducir el riesgo de cargos inesperados.

6. Implementa un software de cobranza para sector inmobiliario

Adoptar un software de cobranza especializado en el sector inmobiliario, como Moonflow, puede optimizar significativamente la gestión de cobros y reducir la morosidad. Estos sistemas, que suelen integrar inteligencia artificial, permiten realizar análisis predictivos para detectar tendencias de morosidad antes de que se conviertan en un problema.

Esto facilita la identificación temprana de clientes con riesgo de impago y permite tomar medidas proactivas. Además, el software automatiza procesos como el envío de recordatorios, la programación de cobros y la gestión de acuerdos de pago, lo que mejora la eficiencia en la cobranza y garantiza un flujo de caja más saludable para la inmobiliaria.