¿Qué se entiende por reclamación de impagos? También llamada reclamación de deudas es el proceso mediante el cual se busca recuperar el pago de una deuda que ha incurrido en impago.
Si consideramos que, en España, el 5% de las empresas tienen un riesgo de cierre a causa de la morosidad, la reclamación de impagos es un proceso necesario para garantizar la supervivencia de un negocio.
Pero ¿qué tipo de proceso es la reclamación de impagados? ¿Se trata de solo medidas de cobranza o implica también procesos legales? ¡En esta publicación te contamos.
¿Qué vas a encontrar en este texto?
No necesariamente. Antes de iniciar el proceso judicial, existe lo que se denomina mediación, que busca alcanzar un acuerdo entre la empresa acreedora y el deudor. Por lo general , la mediación es un proceso gratuito, siempre y cuando sea realizado por la propia empresa. Si el impago se resuelve en esta etapa, no es necesario recurrir a un proceso legal.
El proceso legal posterior tampoco comienza directamente con una acción judicial, sino con una demanda que otorga al deudor un plazo de hasta 21 días para saldar la deuda. Si transcurre ese plazo sin que se resuelva la situación, el cobro puede derivar en un proceso judicial.
La factura es uno de los documentos esenciales en el proceso de reclamación; sin embargo, a esta se pueden sumar acuerdos de pago, en caso se hayan dado en el proceso. Los contratos son otro tipo de documentación efectiva para procesos de recobro.
Sí, las deudas tienen prescripción en España y es importante tenerlo en cuenta en el proceso de reclamación de facturas impagadas. El tiempo de prescripción varía según el tipo de deuda, por ejemplo, en cuanto a la prestación de servicios vence a los 3 años, pero si hablamos de deudas derivados por contratos civiles o mercantiles, su vigencia suele ser de hasta 5 años.
Ahora bien, también se puede dar lo que se denomina “interrupción del plazo de prescripción de la deuda”, gracias a lo cual el tiempo se reinicia, sin embargo, solo se puede dar si se interpone una demanda judicial para reclamar el recobro.
Considera que el tiempo de prescripción es clave para no perder los derechos de cobro sobre la deuda. Esto permite no solo cobrar el monto adeudado, sino también los intereses y gastos generados, incluyendo los gastos asociados a la demanda.
Estos son los pasos que debes seguir para iniciar la reclamación de impagos en España.
Sí, es posible reducir el riesgo de llegar a una reclamación de impagos mediante un mejor control de la cartera de clientes y la implementación de diversas estrategias de prevención. Una de las herramientas más eficaces en este sentido es el uso de software de gestión de cobros, que permite llevar un seguimiento más riguroso de las cuentas pendientes de cobro.
Gracias a estas herramientas, se pueden automatizar tareas clave, como el envío puntual de facturas y la emisión de recordatorios de pago en cuanto se detecta un retraso. Esto ayuda a evitar errores humanos, como el envío fuera de plazo, y permite actuar con rapidez cuando un cliente incurre en mora.
Este tipo de automatización tiene un impacto positivo en el ciclo de cobro, ya que permite recuperar pagos de aquellos clientes que disponen del dinero, pero han olvidado efectuar la transferencia o el pago correspondiente.
Por otro lado, los programas de gestión de cobros también ofrecen funcionalidades útiles, como el análisis del comportamiento de pago de los clientes, la segmentación de la cartera según el riesgo de impago y la elaboración de informes detallados. Todo ello facilita la toma de decisiones y permite anticiparse a posibles problemas, reduciendo la necesidad de recurrir a procedimientos formales o judiciales.
¿Quieres optimizar la reclamación de impagos en tu empresa? Descubre Moonflow, la herramienta de gestión de cobros que está revolucionando el sector. Con nuestra solución podrás ahorrar hasta un 80 % en costes operativos, gracias a la automatización inteligente de procesos y al control eficiente de tu cartera de clientes.