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Indicadores clave de cobranza en una empresa

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Según Bloomberg Línea, más de la mitad de las empresas argentinas tienen problemas para afrontar sus pagos. La falta de liquidez representa una amenaza para la supervivencia de estos negocios y, en gran medida, se debe a una mala gestión de las cuentas por cobrar.

Por eso, el seguimiento de los indicadores de cobranza es clave para detectar a tiempo riesgos de morosidad, optimizar los flujos de caja y garantizar la estabilidad financiera de la empresa.

Pero ¿cuáles son los indicadores de cobranza en una empresa? Un ejemplo de indicador de cobranza es el plazo promedio de cobranza, que mide cuántos días, en promedio, tardan los clientes en pagar desde que se emite la factura hasta que efectivamente hacen el pago. Este indicador es fundamental porque permite evaluar la eficiencia del proceso de cobranza y detectar posibles problemas de liquidez.


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5 indicadores de cobranza que tenés que conocer

Además del plazo promedio de cobro, hay otros indicadores de cobranza que tenés que tener en cuenta. ¡Los mencionamos a continuación!

1. Antigüedad promedio de la deuda

Aunque puede parecer lo mismo que el plazo promedio de cobranza, se diferencian en que este indicador sólo mide las facturas que aún no han sido pagadas. Es decir, calcula cuántos días han pasado, en promedio, desde la emisión de las facturas pendientes hasta la fecha actual.

Este dato es clave porque permite identificar qué tan envejecida está la deuda de los clientes. Si la antigüedad promedio de la deuda es muy alta, puede indicar problemas en la gestión de cobranzas o clientes con dificultades para pagar.

2. Porcentaje de la deuda vencida

Este indicador muestra qué porcentaje de los clientes de una empresa tiene facturas impagas que ya superaron su fecha de vencimiento. Para calcularlo, se divide el número de clientes con deuda vencida entre el total de clientes de la cartera y se multiplica por 100.

Por ejemplo, si una empresa tiene 1.000 clientes y 30 de ellos tienen facturas vencidas, el porcentaje de deuda vencida sería del 3%.

Este KPI es fundamental para evaluar la gestión de cobranzas. Un porcentaje elevado puede indicar la necesidad de reforzar los procesos de seguimiento y recordatorios de pago, mientras que un porcentaje bajo sugiere que la empresa mantiene un buen control sobre sus cuentas por cobrar.

3. Porcentaje de clientes gestionados

Este indicador permite evaluar el desempeño del equipo de cobranzas, midiendo qué porcentaje de los clientes con deudas vencidas fue contactado en un período determinado, generalmente 30 días o menos.

Para calcularlo, se divide la cantidad de clientes gestionados (es decir, aquellos con los que se tuvo algún tipo de interacción para el cobro, ya sea por llamada, correo electrónico o mensaje) por el total de clientes con deudas pendientes y se multiplica por 100.

Es fundamental llevar un registro detallado de las gestiones realizadas para garantizar la efectividad del proceso de cobranza. Un porcentaje alto, idealmente superior al 75%, indica un seguimiento activo y una mayor probabilidad de recuperar la deuda. Si el porcentaje es bajo, puede ser una señal de que se necesitan ajustes en la estrategia o mayor eficiencia en la gestión de cobranzas.

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4. Rotación de cuentas por cobrar

Este KPI de cobranza mide la frecuencia con la que las cuentas por cobrar se convierten en efectivo dentro de un período determinado. Es un indicador clave para evaluar la liquidez de una empresa y la eficiencia en la gestión de cobranzas.

La fórmula de la rotación de cuentas por cobrar implica dividir las ventas netas a crédito entre el promedio de cuentas por cobrar.

Un valor alto indica que la empresa recupera rápidamente el dinero de sus ventas a crédito, lo que mejora su flujo de caja. En cambio, un valor bajo puede señalar demoras en los cobros y la necesidad de ajustar las estrategias de cobranza.

5. Índice de efectividad de cobro

Este indicador mide qué porcentaje de las cuentas por cobrar pendientes al inicio de un período ha sido efectivamente cobrado al finalizarlo. Para calcularlo, se divide el monto total cobrado durante el período entre el total de cuentas por cobrar pendientes al inicio del mismo y se multiplica por 100 para expresarlo como porcentaje.

Por ejemplo, si al inicio del mes una empresa tenía cuentas por cobrar por un total de $500,000 y durante ese mes logró recuperar $400,000, el cálculo sería:

IEC = (400,000 / 500,000) × 100 = 80%

Esto significa que la empresa logró cobrar el 80% de su cartera pendiente en ese período, lo que indica una gestión de cobranzas efectiva.

¿Es mejor manejar los indicadores de cobranza en Excel?

Si bien Excel puede ser una opción económica para gestionar la cobranza, no es la más eficiente. Al no ser un software especializado, requiere actualizaciones manuales, lo que aumenta el riesgo de errores y dificulta el seguimiento en tiempo real. Además, cuando el volumen de cuentas por cobrar es alto, la gestión en hojas de cálculo puede volverse poco práctica y propensa a inconsistencias.

Para mejorar la precisión y optimizar el proceso, es recomendable utilizar un software de cobranzas que, entre sus funcionalidades, permite automatizar cálculos, programar recordatorios de pago y generar reportes detallados sin la intervención manual constante. ¿Te interesa implementar uno? ¡Conocé Moonflow! 

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